viernes, marzo 18, 2011

Cuando te mueves...

Y es que no se me ocurre otra forma de compararlo como la única sensación que tuve en mi vida del primer beso con el chico que me gustaba, solo que al revés.

En aquella ocasión, a mis 13 años, empezaba con mariposas en la garganta, al mínimo contacto con sus labios, y me bajaban hasta la barriga y ahí se quedaban revoloteando.

Ahora son como mariposas en la barriga que revolotean y luego suben a la garganta para casi al segundo desaparecer, a veces de forma muy seguida.

De todas maneras es la sensación más linda del mundo :D

jueves, marzo 10, 2011

Dudando

Fire

Hoy estaba recordando que quizás hace un año, (no sé, no acostumbro tomar el tiempo de las cosas que ya pasaron); estaba desesperada por el diagnóstico de dos pequeños tumores en mi tiroides, estaba angustiada sin querer saber mucho de nadie, encerrada y sin ánimos de nada.

Recordé que al ir donde el oncólogo-cirujano, me mandó a hacer un examen de sangre, cuyo resultado anunciaba que yo por poco y tenía metástasis y entonces debían "estabilizarme" en menos de un mes y operarme casi enseguida!
Que cuando fui a Solca me trataron a la patada, la endocrinóloga me trató como si yo no fuera humana sino un robot, sin sentimientos, y casi ni me examinó; las largas filas y madrugadas para conseguir turno y que finalmente me traten mal...
En cambio, cuando fui al endocrinólogo, al ver esos exámenes, casi no les paró mucha bola, me dijo que esté tranquila, que "no tienes nada", y pese a que los exámenes decían otra cosa, le puse toda la fe del mundo a éste doctor.

Me acordé cuando fui donde un señor-escritor, que sana con las manos, yo no salí tan convencida de ahí, lo admito, aunque si me sentí muy bien durante la "sanación" y cuando terminó la sesión; tenía que volver pero tuve dificultades, luego siguió pasando el tiempo y no volví más.

También me acuerdo que fuimos de paseo al Eje Cafetero en Colombia y que frente al Señor de los Milagros, en la Iglesia donde lo tienen, en Buga, específicamente, yo hice una promesa.

La tal misa de sanación en el puente tres de la Autopista General Rumiñahui... semejante tontera, me sentí muy mal ahí adentro, se sentía hipocrecía por todas partes, la gente me miraba feo porque fui con una blusa de tirantes :S oseaaa, yo jamás acostumbro enseñar casi que nada cuando me visto y ahí apenas si se veían mis hombros y menos de media espalda, pero me criticaron igual "para venir a la Iglesia era que se ponga algo más decente" ¿ah?, si, así tal cual leyeron... pendejas! Y se dicen las muy religiosas, como no, y no hacen más que estar criticando y fijándose en boberías!.

Luego, meses más tarde, agosto o septiembre, vino una chica que es medio amiga y es muy creyente en los ángeles y sus energías, fuimos a La Iglesia de las Lajas, en Colombia, y subimos a la estatua de San Miguel Arcángel, y ella lo invocó para que de igual manera me sanara y se llevara toda enfermedad de mi cuerpo...

Y entonces me pongo a pensar a veces, ¿quién me sanó?, ¿quién hizo desaparecer esos dos tumores de mi tiroides? ¿Fue realmente el Señor de los Milagros o fue éste otro personaje que cura con las manos o la chica de las energías? seguro la tal misa de sanación no fue... es decir, es como si me hubiera encomendado a todo el mundo y la verdad, cuando me dijeron que los tumores ya no estaban, no supe a quién agradecer. Obviamente lo primero que dije fue "gracias Dios", pero la verdad se me hace rarísimo que me den vuelta en la cabeza aquellos otros dos personajes.

Quizás fueron los tres, más seguro el uno, han de decir los más creyentes, jejeje.

El punto es que ya no tengo esos tumores, y que, aunque ahora no soy tan creyente ni devota como lo fui años atrás, voy a cumplir mi promesa. Seguramente cuando llegue la hora tendré los recursos y tiempo para hacerla realidad y ahí les contaré, tengo al menos cuatro años para eso ;)

Hay personas más importantes en qué pensar ahora. Me gusta sentirme saludable, tranquila y sobretodo contenta por todo el presente que estoy viviendo. El resto, ya quedó para cuento.