en las manos
en la lengua
en la nariz
en los ojos
todo pasa corriendo por encima de la piel
y nos desnudan las lágrimas
y los silencios
mientras tanto los fantasmas, los de “mentiras”
unen sus manos invisibles y danzan haciendo un círculo,
y estamos en el centro
y podemos sentir el dolor que existe afuera,
haciéndolo nuestro
cada vez con mayor intensidad,
y es entonces cuando nos descubrimos
solos,
cada uno en medio de la danza que no termina,
son pocos los que han salido del círculo,
pero al salir olvidan la verdad
entonces ni el círculo, ni la danza,
ni el tiempo
en las manos
en la lengua
en la nariz
en los ojos
existen ya...
en la lengua
en la nariz
en los ojos
todo pasa corriendo por encima de la piel
y nos desnudan las lágrimas
y los silencios
mientras tanto los fantasmas, los de “mentiras”
unen sus manos invisibles y danzan haciendo un círculo,
y estamos en el centro
y podemos sentir el dolor que existe afuera,
haciéndolo nuestro
cada vez con mayor intensidad,
y es entonces cuando nos descubrimos
solos,
cada uno en medio de la danza que no termina,
son pocos los que han salido del círculo,
pero al salir olvidan la verdad
entonces ni el círculo, ni la danza,
ni el tiempo
en las manos
en la lengua
en la nariz
en los ojos
existen ya...
6 comentarios:
Encima de la piel los fantamas solos,
la verdad existen ya ...
Pero siempre queda el amigo imaginario
A los tiempos por acá, veo que sigues bien inspirada, saludos
Nacimos solos, vivimos solos, moriremos solos, pero no es tan fácil de aceptarlo y empezamos a mentirnos.
es difícil salir del círculo?
Entiendo eso de que sentimos el dolor que está afuera, el de los demás, lo hacemos nuestro, y después nos sentimos solos. Y al final? Al final, ciertamente eso que entendemos y que sentimos es como el agua de la lluvia... no queda nada.
Todos bailamos una danza rota
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